jueves, 24 de mayo de 2012

Sentido Inverso



Alguien en el mundo arrastra su páramo,
                pero lejos,
atravesado por brumas persigue a su sombra
caminando hacia atrás porque la lleva adentro.
Bandadas de pájaros pasan por el cielo,
tal vez encuentren al solitario de la mano del viento
yendo hacia donde no sabe que va
                 y le nublen el camino
hasta que pierda los ojos,
ingrávidos trepadores del silencio,
y aprenda a comer
                día por día
de la granada lo que vuelve dulce
su tormenta sin cuerpo,
apenas un agua roja iluminada
que estalla en la mordida
                y da la suerte.

No sé por qué
las cosas tienen que ser así,
llevarse la suerte a la boca
                y dormir
cuidando de nuestro fantasma
para que no camine siempre
dado vuelta hacia el pasado.

Tal vez alguien en su propio olvido
                está perdiendo ahora la vida
y vuelan con su nombre los pájaros
triangulando puertas del horizonte
que cambian de color
según la luz dispersa círculos
                irreales del firmamento.


(De : Separata)

domingo, 13 de mayo de 2012

Paisaje de Invierno - P. Bruegel - 1565


Poema X







Alguien viene y se queda, 
inmóvil,
reclamando del recuerdo
la mirada mágica,
el giro de la sangre del corazón celebrante,
el laberinto del tiempo que viene y va,
jinete ciego y vagabundo
desvelado en treguas del camino.


Alguien pisa la huella de un rostro
y se levanta la sombra con su lágrima suelta.
Olor a viento lejano
se anuncia en la punta de sus dedos,
cicatriz de nieve y bosque,
plegaria de mar en el ojo de la tarde.


Caen las nubes como liebres fugaces.
Descalzas de invierno
despiertan el bisturí del horizonte.




(De: Samotracia - 1999)

martes, 1 de mayo de 2012

Poema V


                


Imposible partir de Los Nacimientos
y olvidar al sol puesto a tatuar sus manos
              en la distancia fulgurante
imposible quedarse con figuras de altura
              como si fueran un dibujo
              del mero acontecer geológico
cuando en el fluir del magnetismo
se sostienen armónicos
              médanos y volcanes             
engarzados a un cielo que nos inmensa
hasta dejarnos anónimos en el regazo de la luz
               y en ella flotamos
nublado el cuerpo que encontró sus libertades
               al desterrar ataduras del abismo
pues sólo el tiempo tiene cuerpo
               y nos huelen las cumbres
               y en la noche sus astros nos cabalgan
               y somos memoria del paisaje
               y del futuro una cierta adivinanza
fertilizados por silencios que eyaculan
               ritmos del universo              
               que no se consumen nunca
porque al puñal del rayo se desgració la muerte.
                
Aquí en la Puna
               la tierra fue más allá de ella misma.