Hablemos ahora de lo
que no puedes ver
porque no lo habitas
nunca has dejado de
ser extranjero
derritiéndote al
descampado
sobre el reloj de
Dalí
tu memoria no te
pertenece
se la llevaron los
pies que caminan lejos
no importa si ahora recuperas
lo que crees tus
raíces
ahora vuelas
con un solo recuerdo
te reconstruyes
pero no te habitas
las hojas
desencarnadas de los árboles
te esperan
cuando caigas sobre
ellas
comenzará tu sueño
a qué hablar del sol
escondido en un bolsillo
si la luna lo devora.