El
aliento del arenal nos dice
quedamos pocos
corriendo
tras los caballos blancos
flujo
arqueológico de luciérnagas
sobre
la hierbabuena
inunda
la almohada
y
esa luna sospechada de arcanos
en
el reino de los animales
y los frutos
de los árboles de Castilla
y los frutos
de los árboles de Castilla
me
habría dicho vamos hermana
deja
de acostarte de espaldas
sobre el exilio
no
señales la orfandad no
suficiente
con este atadito de grietas
que
llevas en la frente
y
la montaña
gastada de tanto empujarla adentro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.