miércoles, 7 de enero de 2015




Si yo tuviera un caballo
digo           si un caballo fuera mio
saldría
            a galope feroz
para llegar al cardón amortajado
en su abismo de espinas y viento
abrazaría la oscuridad
quemada por las estrellas
aventando lejos
            cualquier aliento miserable

encontraría la casa marchita
por ella caminaría
bajo las lluvias que desarraigan
            a enero del cielo
y vería al cardón abrir en puñados de luna
            su savia extenuada
pero la casa
tan quieta en la distancia          tan sin alas
            ya no existiría.





(Inédito)